Sales de Schüssler


Las sales de Schüssler son el resultado de la investigación del médico alemán Wilhelm Heinrich Schüssler (1821-1898) quien desarrolló el sistema llamado Bioquímica. Este término hace referencia a los procedimientos y reacciones que se producen de manera natural en el organismo, como la respiración, la digestión o el metabolismo. La bioquímica también indica el tratamiento que Schüssler desarrolló después de muchas y largas investigaciones.

 

  Tras estudiar medicina en París, Schüssler se adentró a estudiar homeopatía con la que trabajó en consulta durante quince años. Sin embargo, influido por las recientes investigaciones en bioquímica y medicina, sus conocimientos homeopáticos y las teorías del químico Justus von Liebig y el fisiólogo Jacob Moleschott, descubrió la importancia de las sales minerales para el funcionamiento de los organismos humano y animal.

 

  Queriendo simplificar el método homeopático reduciendo el número de medicamentos y tomando como inspiración una frase de Moleschott publicada en un trabajo científico, que decía lo siguiente:
...las sustancias que permanecen después de la combustión de los tejidos humano y animal, llamadas cenizas, son la base que dan forma al tejido y establecen su tipología. No hay hueso sin fosfato cálcico, no hay cartílago sin sal, no hay sangre sin hierro, no hay saliva sin cloruro potásico”. se embarcó en investigar qué otras sales minerales (además de las descritas por Moleschott) tenían mayor presencia en el cuerpo. Analizó las cenizas de los cadáveres de un crematorio y averiguó que en los diferentes tejidos y órganos predominan diferentes sales minerales: En el tejido muscular encontró básicamente fosfato de potasio y fosfato de magnesio, en las membranas mucosas encontró cloruro potásico y en el tejido óseo encontró fosfato cálcico.


  Para el pensamiento homeopático de Schüssler (Similia Similibus Curantur= lo similar cura lo similar), esto le impulsó hacia la idea de utilizar las sales de un tejido como un remedio para enfermedades de ese mismo tejido. Utilizando las potencias homeopáticas con las Sales mediante varias diluciones vio que las sustancias se distribuyen en partículas tan finas que logran entrar en el interior de las células mejorando su distribución y así es como se crearon las Sales de Schüssler.

  En las primeras pruebas clínicas Schüssler obtuvo grandes resultados, por lo que continuó trabajando con entusiasmo. La mayoría de tratamientos fueron un éxito rotundo, incluso en casos donde otros tratamientos habían fracasado.

 El resultado de toda la práctica clínica y estudios que realizó confirmó que las Sales de Schüssler no sólo pueden restablecer funciones fisiológicas en el organismo, sino también mantenerlas en activo.

 Largos años de investigación y práctica dieron como resultado las hoy conocidas como 12 Sales de Schüssler, todas ellas necesarias para el equilibrio de los diferentes mecanismos corporales.

 

 Algunas de las propiedades y efectos de estas sales son:

  • Soporte para el crecimiento y desarrollo de los tejidos
  • Equilibrio del metabolismo hídrico
  • Refuerzo del metabolismo óseo y muscular
  • Modulador en fases de inflamación
  • Regulador de la tensión y elasticidad de diferentes tejidos
  • Mejora del funcionamiento de la conducción nerviosa y del estado de ánimo
  • Ayuda en la limpieza y detoxificación de los órganos y tejidos
  • Regulación del ph llevando a un equilibrio ácido-base
  • Ayuda en procesos de agotamiento y cuadros de dolor

   Cabe mencionar que esa terapia es totalmente segura y no presenta contraindicaciones no medicamentos alopáticos, se pueden tomar durante la infancia e incluso en el embarazo.