Nutrición y Metabolismo


  Una buena alimentación es fundamental para el óptimo funcionamiento de nuestro organismo. Ya en su época, Hipócrates decía: "Deja que la comida sea tu medicina y la medicina sea tu comida". Desde la antigüedad, existen evidencias experimentales que relacionan la dieta con el padecimiento de algunas enfermedades. Uno de los primeros casos en descubrirse fue la relación entre el escorbuto, en los marinos embarcados durante largos períodos de tiempo, y la falta de frutas y hortalizas frescas en su dieta. La pelagra y el beri beri son ejemplos de otras carencias alimentarias que llevan directamente a la patología.

 

  Desde entonces, en los siglos siguientes ha tomado relevancia la importancia de la prevención de enfermedades a través de una alimentación equilibrada y saludable, y en la actualidad, la relación nutrición-salud se apoya en múltiples estudios científicos y epidemiológicos. Sin embargo, aunque cada vez es más conocida la ciencia de la nutrición, no pierde interés ni deja de ser actualidad ya que continuamente se están descubriendo propiedades nuevas de los diferentes alimentos.

 

  Hoy por hoy es innegable el importante papel que juega la nutrición en el mantenimiento de la salud y su influencia en la evolución de múltiples patologías y trastornos.

 

  A lo largo de mi largo recorrido en diferentes enfoques nutricionales, y a diferencia de la nutrición más clásica, he aprendido a contemplar los nutrientes no como meros aportadores de calorías, vitaminas y minerales, sino considerando el gran papel biorregulador que ejercen en el organismo, lo que va mucho más allá de que aporten un simple nutriente u otro.